Qué hacer y qué ver cerca de Pompeya
Pompeya está en una muy buena ubicación no solo para visitar su zona arqueológica sino para disfrutar de la naturaleza y los paisajes de sus alrededores. Te dejo una lista de mis sitios preferidos cerca de Pompeya.

Vistas de Pompeya | iStock
A poco más de 20 kilómetros de la Bella Napoli se encuentra Pompeya, la ciudad romana petrificada bajo la lava del Vesubio. Su enclave geográfico estratégico la convierte en solo una de las paradas que se pueden hacer a lo largo de una ruta por esta zona preciosa de Italia.
Si ya has hecho los deberes reservando tu excursión a Pompeya desde Roma y tienes tiempo para planificar cómo seguir recorriendo la zona, toma una nota de los imprescindibles cerca de Pompeya.
1. Sube al Vesubio

Es sin duda el temido protagonista de la historia de Pompeya, lo verás en el horizonte nada más llegues hasta la zona y cuando entró en erupción hace casi 2000 años sepultó la ciudad (y a muchos de sus ciudadanos) bajo la lava.
Si has llegado hasta aquí y tienes tiempo y energía suficientes, te recomiendo 100% la subida al volcán. Verás el cráter en todo su esplendor y obtendrás las mejores vistas de Pompeya y sus alrededores.
Si has estado visitando Pompeya, podrás llegar desde allí hasta el Vesubio en autobús por menos de 3 Euros y después de un viaje de poco más de media hora, estarás ya a 1000 metros de altitud.
Una vez allí, tendrás que subir la última parte a pie (la más empinada) y por 10 € podrás acceder a la cima del Monte Vesubio. Puedes leer más información para organizar tu visita aquí: Cómo visitar el Monte Vesubio, el volcán de Pompeya.
2. Sigue viajando en el tiempo en Herculano

Declarado Patrimonio Mundial de la Unesco junto a Pompeya, Herculano era otra de las ciudades víctimas de la lava del Vesubio.
Verás varios templos, restos de las termas... en general se puede decir que esta ciudad está incluso mejor conservada que Pompeya, ya que hay algunos edificios que han podido preservar sus dos alturas. De hecho la altura de algunas de las columnas que quedan en pie son realmente increíbles.
También verás mosaicos y restos de una ciudad que en su día congregó a habitantes que tenían incluso un mayor poder adquisitivo que los de Pompeya. Completar tu viaje con una visita a Pompeya será una gran opción, ya que además es menos turística y la visita es muy auténtica. En este pequeño documental tienes un aperitivo para que sepas lo que te espera.
3. Piérdete en Nápoles

Nápoles es caótica, es el corazón de la Italia más tradicional, la cuna de la gastronomía italiana y del amor por la familia y la "mamma". Sus vistas al mar, su bahía excepcional, el clima templado prácticamente todo el año y sus exquisitas pizzas la convierten en una de las ciudades más visitadas de Italia.
Está a poco más de 20 kilómetros de Pompeya y se puede llegar en tren en unos 40 minutos. Cualquier excusa es buena para acercarse hasta Nápoles, pero si hasta llegado hasta Pompeya, no puedes dejar pasar la oportunidad.
Una vez allí, visita la increíble Piazza del Plebiscito y la famosa Galería Umberto I, pero no dudes en perderte por las calles del Quartiere Spagnolo y la zona de Spaccanapoli para descubrir la verdadera esencia de Nápoles.
4. Vive unos días de cine en Capri

Bañada por el Mar Tirreno, la idílica Capri es una colorida islita llena de vida que te permitirá vivir la Bella Vita en su máximo esplendor. Su conocidísima gruta azul y la roca de Faraglioni no te dejarán guardar la cámara de fotos ni un segundo.
Acércate a la plaza del pueblo para tomar el aperitivo bajo los últimos rayos de sol del día y te sentirás un verdadero actor o actriz de cine italiano. El ambiente lujoso es totalmente de película.
Durante el día, aprovecha para dar un paseo en barco y darte un baño en las cristalinas aguas del Tirreno y olvídate del mundo exterior: ¡Capri es un sueño y no vas a querer despertarte!
5. Visita la Costa Amalfitana

Bañada por el Tirreno y en pleno golfo de Sorrento, al sur de Nápoles, se encuentra la bellísima Costa Amalfitana. Praiano o Ravello son solo algunas de las maravillas que te regalará esta costa.
Casitas de colores, terrazas con vistas al mar, pueblos con encanto... Unas vacaciones en la Costa Amalfitana son la quintaesencia de la vida italiana: aquí el tiempo se para y parece que todo el mundo esté de vacaciones.
Aperol en mano, disfruta de una buena pasta con almejas y date cada mañana un chapuzón mientras contemplas unos acantilados llenos de color y buen gusto.