Más acerca de: Lanzarote en 7 días: qué ver y qué hacer en una semana
Un tercio de la isla de Lanzarote estuvo alguna vez cubierta de lava, lo que le ha dado un carácter volcánico único. Entre cráteres, playas de arena clara, pueblos pesqueros y arte integrado en la naturaleza, la isla ofrece experiencias muy distintas en cada rincón. Si estás pensando qué ver en una semana, este itinerario es para ti.
Día 1: Mirador del Río, isla La Graciosa y Órzola
Arranca el viaje en el norte, con vistas panorámicas, playas tranquilas y pueblos donde el ritmo se detiene. Desde el Mirador del Río verás la isla de La Graciosa, donde puedes pasar el día entre arena y mar. Termina el recorrido en Órzola, perfecto para cenar junto al mar.
Mirador del Río
Situado a 400 metros sobre el mar, el Mirador del Río es una obra de César Manrique que ofrece unas vistas espectaculares a La Graciosa. Su arquitectura se funde con la roca, y cuenta con cafetería, prismáticos y aparcamiento. También puedes ver el paisaje gratis desde el cercano Mirador de Nahum.
Isla La Graciosa
Desde Órzola puedes tomar un ferry a La Graciosa, una isla sin coches ni asfalto. Recorre su pequeña aldea y disfruta de la playa Francesa, accesible caminando o en bici. También puedes reservar una excursión desde Lanzarote que incluye paseo en catamarán y almuerzo.
Playa Caletón Blanco
En el camino de regreso, detente en la playa Caletón Blanco, con arena blanca, rocas volcánicas y aguas poco profundas. Es una de las mejores playas para ir con niños y perfecta para un último chapuzón del día.
Pasea por Órzola y prueba su gastronomía
Órzola es un pueblo pesquero con calles blancas y ambiente tranquilo. Es un lugar ideal para terminar el día probando pescado fresco o marisco en alguno de sus restaurantes junto al mar.
Día 2: Jameos del Agua, Cueva de los Verdes y paseo en barco
Dedica el día a dos joyas volcánicas de Lanzarote: Jameos del Agua y la Cueva de los Verdes. Por la tarde, relájate con un paseo en barco al atardecer desde Puerto del Carmen, una forma perfecta de ver la costa con otra perspectiva.
Cueva de los Verdes
La Cueva de los Verdes es un túnel volcánico que puedes recorrer en visitas guiadas. Tiene una sala de conciertos natural y fue intervenida por César Manrique, quien supo resaltar su belleza con luz y diseño.
Jameos del Agua
A pocos minutos, Jameos del Agua es otro tramo del mismo tubo volcánico, donde encontrarás un lago interior, restaurante y espacios diseñados por Manrique que combinan arquitectura y paisaje.
Pasea en barco al atardecer
Desde Puerto del Carmen puedes hacer un paseo en barco con aperitivos y copa de champán incluida. Verás acantilados y playas desde el mar, mientras disfrutas del atardecer.
Día 3: Parque Nacional Timanfaya
El tercer día está dedicado al increíble paisaje volcánico del Parque Nacional de Timanfaya: cráteres, rocas rojizas y campos de lava que parecen de otro planeta. Aquí también puedes probar comida hecha con el calor del subsuelo.
Centro de interpretación de Mancha Blanca
Antes de entrar al parque, visita este centro gratuito, donde conocerás la historia geológica de la zona y el origen de las erupciones. Ideal como introducción.
Islote de Hilario
En el Islote de Hilario verás demontraciones geotérmicas, como géiseres artificiales o piedras ardiendo al contacto con el aire. Desde aquí parte la Ruta de los Volcanes.
Ruta de los Volcanes en Timanfaya
Esta ruta guiada en autobús te lleva por los rincones más espectaculares del parque. El terreno es tan frágil que no se puede recorrer a pie.
Senderos de Tremesana
Si te apetece andar, puedes reservar una ruta gratuita a pie desde el centro de interpretación. Tiene 2 km de recorrido y requiere inscripción previa.
Día 4: Museo del Atlántico y playas del Papagayo
Hoy toca explorar el sur: bucea entre esculturas submarinas en el Museo del Atlántico y luego relájate en las calas vírgenes del Monumento Natural de Los Ajaches.
Museo subacuático
El Museo del Atlántico solo se puede visitar buceando. Hay más de 300 esculturas bajo el mar, obra de Jason de Caires Taylor. Es ideal para hacer tu bautismo de buceo.
Playas del Papagayo
Las playas del Papagayo son calas de arena blanca y agua cristalina, conectadas por senderos. También puedes ver el yacimiento arqueológico de San Marcial Rubicón en la playa del Pozo.
Día 5: Casa Museo del Campesino y ruta del vino
Este día está dedicado a la cultura local. Comienza en la Casa Museo del Campesino, y luego recorre algunas de las bodegas más representativas de la isla.
Casa Museo del Campesino
La Casa Museo del Campesino fue diseñada por Manrique como homenaje a los agricultores de la isla. Aquí puedes ver arquitectura tradicional, comprar artesanías o comer platos típicos.
Ruta del Vino
La carretera LZ-30 conecta bodegas como Los Bermejos, El Grifo y La Geria, donde puedes hacer catas y aprender sobre el cultivo en suelo volcánico.
Día 6: Museo de Arte y Fundación César Manrique
Hoy toca arte. Visita el Museo Internacional de Arte Contemporáneo y luego la Fundación César Manrique, en Tahíche.
Museo de Arte Contemporáneo
Ubicado en un antiguo castillo, este museo alberga obras de Miró, Tàpies y Sempere, además de un restaurante con vistas al mar.
Fundación César Manrique
Construida sobre burbujas volcánicas, la antigua casa de Manrique es ahora museo. Puedes combinar la visita con un paseo por Tahíche o acercarte a la Casa Museo Haría.
Día 7: Charco de los Clicos, Los Hervideros y Salinas de Janubio
Cierra tu itinerario en el suroeste de la isla con paisajes volcánicos y fenómenos naturales únicos.
Charco de los Clicos
Este lago verde, dentro de un cráter volcánico, debe su color al azufre y las algas. Se puede ver desde el mirador o caminar hasta la orilla.
Los Hervideros
En esta zona de acantilados, el mar entra con fuerza en túneles de lava, creando chorros de agua a presión. Es un espectáculo natural impresionante.
Salinas de Janubio
Estas salinas históricas siguen activas desde 1895. Además de producir sal, forman un paisaje fotogénico y son zona protegida para aves.