Qué ver y hacer en Valencia en 3 días

Conoce la ciudad de las artes y las ciencias. Un lugar lleno de contrastes donde podrás sorprenderte tanto de su rico patrimonio histórico como de su ambiente moderno e innovador.

Rocio Biagetti

Rocio Biagetti

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Qué ver y hacer en Valencia en 3 días

Valencia | ©Pedro

Valencia, una ciudad que combina una gran riqueza cultural con un ambiente moderno y vanguardista, kilómetros de fantásticas playas y una exquisita gastronomía. Todo esto la convierte en una de las ciudades más completas e interesantes que visitar de toda España.

Quedando en el puesto número tres de las ciudades más grandes del país, Valencia es también conocida por su animada vida y como no, por su plato más famoso: la paella. En este itinerario te voy a ayudar a organizar un viaje de tres días por este maravilloso destino para que sepas todo lo que hay que ver y hacer en Valencia y no te pierdas nada.

1. Día uno: explora el centro histórico de Valencia y visita un museo muy especial

Plaza de la Virgen | ©Valentina Londoño
Plaza de la Virgen | ©Valentina Londoño

Para comenzar tu primer día en la ciudad portuaria de Valencia, vas a comenzar por conocer su casco histórico y los maravillosos edificios monumentales que se encuentran en él.

Tras realizar un recorrido por sus construcciones más emblemáticas, tendrás la oportunidad de conocer su famoso Mercado Central, donde probarás algunas de las comidas tradicionales de la zona.

Por la tarde, tras pasear un poco más por el centro de esta hermosa ciudad, entrarás en su museo más especial: El Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias Gonzalo Martí. Y para finalizar este día tan completo, te desplazarás hasta el barrio de Ruzafa, una de las zonas más animadas donde podrás cenar y si te apetece, cerrar la noche con una copa en uno de sus numerosos pubs.

Empieza el día en la Plaza de la Virgen

El primer punto en tu itinerario de hoy, va a ser la céntrica Plaza de la Virgen. Esta monumental plaza se sitúa en lo que un día fue el foro romano de la ciudad y en su interior alberga la Basílica de la Virgen de los Desamparados, el Palacio de la Generalitat Valenciana y la Catedral de Valencia.

Además, en el centro de la plaza se encuentra una magnífica fuente obra del escultor Manuel Silvestre Montesinos en 1976 y que representa una alegoría del río Turia.
Debido a la belleza de este lugar, te recomiendo que te tomes un café en alguno de sus bares para poder contemplarlo con tranquilidad.

Y a continuación, realizarás tu primera visita del día entrando en la Catedral del Santo Cáliz, cuyo estilo predominante es el gótico valenciano.

La entrada incluye la visita al museo catedrático y, aunque para subir a su torre campanario Miguelete haya que pagar una entrada aparte, te animo a que lo hagas, ya que la entrada es bastante económica y no te arrepentirás cuando veas las fantásticas vistas de la ciudad con las que te obsequia. Otra opción igualmente buena sería contratar un tour por el centro de Valencia, en el que vienen incluidas tanto la entrada a la catedral como a otros de sus monumentos más importantes.

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Continúa el recorrido con la Basílica de la Virgen de los Desamparados

Después de visitar la Catedral de Valencia y de subir a su alta torre, tu siguiente punto en el camino será la Basílica de la Virgen de los Desamparados, que se encuentra justo a su lado.

Este templo cuyo estilo se encuentra a medio camino entre renacentista y barroco está dedicado a la Virgen de los Desamparados, la patrona de la ciudad. De hecho, en su interior podrás encontrar un museo dedicado íntegramente a ella y que abarca desde pinturas hasta esculturas y obras de cerámica. Una de las características más destacables de la basílica es su enorme cúpula, que cubierta de frescos es considerada como la joya de la iglesia.

  • Dónde se encuentra: Plaza de la Virgen, 6.
  • Horario: de lunes a domingo de 7:30 a 14:00 h y de 16:30 a 21:00 h.
  • Precio: la entrada general para entrar en la basílica es de aproximadamente 4€, pero si entregas el ticket de entrada a la catedral el precio se reduce.

Sigue tu camino hasta la Iglesia de San Nicolás y la Lonja de la Seda

Siguiendo con la ruta propuesta, los dos lugares que vas a visitar a continuación son La Iglesia de San Nicolás y la Lonja de la Seda. Ambos se encuentran a menos de 5 minutos a pie de los destinos anteriores.

La Iglesia de San Nicolás de Bari y San Pedro Mártir tiene el honor de ser denominada como la Capilla Sixtina valenciana debido a la impresionante obra pictórica que alberga en su interior.

En cuanto a La Lonja de la Seda, se trata de un imponente edificio gótico cuya belleza e importancia cultural la han llevado a formar parte de la lista de los lugares considerados como Patrimonio de la Humanidad.

Si por otra parte, prefieres realizar tu recorrido por Valencia de la mano de un guía experto, puedes consultar los mejores tours por Valencia y reservar uno para asegurarte de no perderte ningún detalle de esta magnífica ciudad.

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Disfruta la gastronomía valenciana en el Mercado Central

En la parte más céntrica de la ciudad, junto a la Lonja de la Seda, se sitúa el impresionante Mercado Central de Valencia, uno de los mercados más grandes de productos frescos de Europa.

Además, se encuentra en un edificio modernista con una estructura formada por altas columnas de hierro de lo más característica y que abarca hasta 8.000 metros cuadrados de superficie. Entre sus 1.200 puestos podrás encontrar carne, pescado, quesos, frutas, verduras y mucho más. Una vez allí, te animo a que aproveches para comer en el Restaurante Supergourmet del Mercado, un bar de tapas exquisitas cuya relación calidad precio es estupenda. Eso sí, te recomiendo que reserves con antelación.

Otra fantástica opción para la hora de la comida sería que reservaras un recorrido gastronómico por Valencia, en el que tendrías la oportunidad de degustar hasta 10 platos diferentes.

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Continúa con tu paseo hasta el Museo Nacional de Cerámica

Antes de llegar hasta el museo mencionado, vas a dar un rodeo para pasear por la Plaza Redonda y la Plaza del Ayuntamiento. Ambas se encuentran a muy poca distancia del Mercado Central, por lo que te animo a que te desplaces hasta ellas para así poder conocer dos de los lugares más representativos de la ciudad valenciana.

Cuando termines tu agradable paseo, dirígete hasta el , que se encuentra en el hermoso Palacio del Marqués de Dos Aguas. Este maravilloso palacio de estilo rococó alberga en su interior una impresionante colección de cerámica tanto española como extranjera que no te dejará indiferente.

  • Dónde se encuentra: Carrer del Poeta Querol, 2.
  • Horario: de martes a sábado de 10:00 a 14:00 h y de 16:00 a 20:00 h. Los domingos de 10:00 a 14:00 h.
  • Precio: la entrada general es de aproximadamente 3€.

Termina el día en el barrio más alternativo de Valencia

Para finalizar tu primer día en Valencia, te voy a pedir que te desplaces hasta su barrio más "cool", el barrio de Ruzafa. Esta zona de la ciudad fue antiguamente un barrio árabe, que debido a la gentrificación, se ha convertido en un lugar multicultural repleto de restaurantes de lo más vanguardistas, librerías-café, galerías de arte y bares de copas.

El corazón de este barrio es sin lugar a dudas el Mercado de Ruzafa, un colorido edificio que oculta en su interior un gran número de puestos y restaurantes. Una vez allí, incluso tendrás la oportunidad de realizar un taller en el que te enseñarán a preparar una auténtica paella valenciana con productos adquiridos en dicho mercado.

Para la cena, te recomiendo que te acerques al restaurante Maui Russafa, un bar de tapas de gran calidad y a un precio bastante económico. Después, podrás aprovechar para tomar una copa en alguno de los pubs cercanos.

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2. Día dos: conoce el museo más emblemático de la ciudad

Ciudad de las Artes y las Ciencias | ©Pablo Simonetti
Ciudad de las Artes y las Ciencias | ©Pablo Simonetti

Para tu segundo día, te tengo preparada una mañana en la famosa Ciudad de las Artes y las Ciencias, un plan imprescindible si decides pasar tus vacaciones en Valencia.

Tras degustar una deliciosa paella valenciana, darás un paseo por una de las playas de la ciudad hasta llegar al Port de Valencia. Y para terminar el día, podrás conocer una zona de la ciudad muy especial: el Barrio de Cabanyal.

Conoce la impresionante Ciudad de las Artes y las Ciencias

La Ciudad de las Artes y las Ciencias es un lugar ideal si visitas Valencia con niños. Sin embargo, no hace falta ir con los más pequeños para disfrutar de este enorme complejo de difusión científica y cultural.

Con más de 350.000 metros de superficie, este lugar se ha concebido como una ciudad independiente dedicada al ocio cultural y formada por seis áreas diferentes destinadas a distintos fines:

  • El Palau de les Arts Reina Sofía, destinado a las artes escénicas y la ópera.
  • El Hemisferic, un planetario, láser y sala de proyección de cine IMAX.
  • El Umbracle, un hermoso jardín donde pasear.
  • El Museu de les Ciències Príncipe Felipe, un museo de ciencia interactivo.
  • El Oceanografic, el acuario más grande de Europa.
  • El Ágora, un especio dedicado a la celebración de eventos.

Esta visita te llevará, como mínimo, toda la mañana y podrás comprar entradas separadas para los edificios que más te interesen, juntas para tener la oportunidad de hacer una visita completa o reservar una visita guiada.

Prueba una verdadera paella valenciana

Si bien es cierto que la mayoría de visitas que vas a realizar se pueden hacer a pie, debido a que esta parte de la ciudad está más alejada del centro, te recomiendo que cojas un autobús.

Para llegar al restaurante en el que podrás probar la famosísima paella de Valencia, al salir de La Ciudad de las Artes y las Ciencias solo tendrás que coger la línea 99 y bajarte en la parada La Malva-rosa - Mendizàbal. Igualmente, podrás consultar la información de los autobuses en la web de transportes de Valencia.

Situado cerca de la Playa de la Malvarrosa, el Restaurante Casa Carmela es un espacio gastronómico centenario especializado en arroces. Allí, podrás degustar una fantástica paella valenciana cocinada de manera tradicional. Es recomendable que reserves con antelación.

Pasea por la costa de Valencia

Tras una inolvidable comida en un restaurante de lo más típico, te recomiendo que continues tu recorrido con una caminata por el paseo marítimo de la Playa de la Malvarrosa hasta llegar al Puerto de Valencia.

Si tienes suerte y viajas a Valencia en verano, incluso podrás aprovechar este paseo para darte un baño y refrescarte en la playa más conocida de la ciudad. Una vez llegues al puerto, podrás ver todas las embarcaciones que atracan allí, admirar el Edificio del Reloj o sentarte a tomar algo con vistas al mar.

Cierra tu segundo día con una visita al Barrio de Cabanyal

A poco más de 15 minutos a pie del puerto se encuentra el pintoresco Barrio de Cabanyal. Esta zona de la ciudad es conocida por sus hermosas casitas de colores con toques modernistas cuyas fachadas se encuentran recubiertas de azulejos.

Una curiosidad sobre este barrio es que antiguamente llegó a ser un municipio independiente llamado el Pueblo Nuevo del Mar. Hoy en día pertenece a la ciudad de Valencia, pero mantiene el ambiente costumbrista del pueblo de pescadores que fue alguna vez. Pasear por sus calles es un auténtico placer, por lo que te propongo que las recorras con tranquilidad admirando sus hermosos edificios.

Otra característica a destacar de este pequeño rincón valenciano, es su maravillosa oferta gastronómica. Por este motivo, te voy a recomendar que aproveches para cenar por la zona. Dos de los restaurantes mejor valorados son la Taberna de Anyora, un local tradicional de tapeo con ingredientes locales y vino ecológico, y La Sastrería, un exclusivo local decorado de forma exquisita al estilo marinero cuya especialidad es el marisco .

3. Día tres: despídete de Valencia con una visita al animado Barrio del Carmen

Mercado de Colón | ©Lubbertus
Mercado de Colón | ©Lubbertus

Para tu tercer y último día te he preparado un recorrido por el centro de la ciudad que comenzará en la Estación del Norte, atravesará el Jardín del Turia y finalizará en el conocido Barrio del Carmen, pasando por algunos de los monumentos que se encuentran por la zona.

Empieza el recorrido con la Estación del Norte y el Mercado de Colón

Para comenzar el último día, vas a visitar la Estación del Norte, una estación de ferrocarril construida en un hermoso edificio modernista, perteneciente a la corriente de la "Sezesión Vienesa" y que es obra del arquitecto Demetrio Ribes. Este enorme edificio tiene una gran importancia arquitectónica y es considerado como uno de los más representativos de la ciudad.

Tras esta primera visita vas a andar aproximadamente 10 minutos hasta tu siguiente punto en el recorrido, El Mercado de Colón, otro imponente edificio de estilo modernista que ha sido declarado Monumento Nacional.

Compuesto por tres grandes naves que forman un espacio abierto y luminoso, el mercado alberga en su interior un gran número de bares y restaurantes con una oferta gastronómica y de bebidas cuanto menos espectacular.

Aunque si la gastronomía es una de tus pasiones, sería interesante que consideraras la opción de reservar un tour gastronómico por Valencia, donde podrás descubrir todos los secretos de la cocina y los productos locales.

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Pasea por el inmenso Jardín del Turia

Después de visitar el impresionante Mercado de Colón, te voy a pedir que des un corto paseo hasta la entrada más cercana del Jardín del Turia, un gigantesco parque donde podrás relajarte en la naturaleza. Este jardín llega hasta la Ciudad de las Artes y las Ciencias y en él, además de existir múltiples zonas de juego infantil, se celebran en ocasiones ferias y conciertos.

Conforme se vaya acercando la hora del almuerzo, podrás volver al centro de la ciudad para llegar al fantástico restaurante Rincón 33. En este local situado en el Carrer de la Corretgeria podrás comer varios tipos de arroz, coronados con el delicioso socarrat típico de la zona. Eso sí, ten en cuenta que si quieres probar la tradicional paella valenciana deberás reservarla con antelación.

Una opción rápida y divertida de continuar con tu recorrido por Valencia sería alquilando un scooter eléctrico con el que podrás llegar a todos los rincones en mucho menos tiempo, además de pasarlo en grande.

Continúa tu camino hasta las Torres de los Serranos

Tras un buen banquete en el Rincón 33, tu siguiente destino serán las Torres de los Serranos. Sin embargo, antes vas a hacer un corto desvío, ya que a tan solo 3 minutos del restaurante se encuentra la Horchatería Santa Catalina, y es que no querrás irte de Valencia sin probar su bebida más famosa.

En esta horchatería de más de dos siglos podrás elegir si degustar una horchata casera, un agua de valencia o un buen helado artesano. Después de darte un capricho, caminarás a penas 10 minutos hasta las Torres de los Serranos.

Estas dos torres medievales fueron construidas con el fin de defender una de las entradas más concurridas de la antigua ciudad de Valencia. Además, también sirvieron como arco del triunfo y actualmente son consideradas como uno de los iconos más emblemáticos de la ciudad.

Termina tu último día en Valencia con un paseo por el popular Barrio del Carmen

Este barrio de origen milenario toma su nombre de la Iglesia y el Convento del Carmen.

Si bien el Barrio del Carmen estuvo una vez circundado por una muralla, hoy en día solo quedan dos conjuntos de torres que conmemoran aquella época.

Además de contar con unas hermosas calles pobladas de pintoresca casitas por las que da gusto pasear, este barrio es uno de los centros de ocio de la ciudad, convirtiéndose por la noche en una zona de fiesta. También podrás encontrar mercados, restaurantes, terrazas y hasta varios museos. Algunas de las visitas que puedes hacer en el interior de este barrio son:

  • El Portal de Valldigna
  • El Mercado de Mossén Sorell
  • La Plaza del Tossal
  • El Museo Valenciano de Arte Moderno
  • El Museo de la Prehistoria
  • Las Torres de Quart

Por último, para la cena te voy a recomendar cualquiera de los locales especializados en pescado y marisco del barrio. En ellos, vas a encontrar una cocina exquisita y una relación perfecta relación calidad-precio.