Excursión a Castelbuono con cata de vinos desde Cefalú
Acerca de esta actividad
Lo más destacado
Descubre la magia medieval de Castelbuono, joya de las montañas Madonie, en una excursión de medio día que parte desde Cefalú. Tras un cómodo trayecto panorámico, pasearás por callejuelas empedradas, probarás el famoso manna y visitarás la imponente Rocca Ventimiglia, el castillo que domina el valle.
La experiencia culmina en la tranquila Abbazia Sant’Anastasia, un antiguo monasterio benedictino reconvertido en bodega orgánica. Entre muros centenarios y barricas de roble, catarás tres vinos de terroir maridados con bruschette de aceite de oliva local y quesos sicilianos.
- Reserva tu plaza y olvida el coche: transporte incluido
- Prueba vinos de autor en un escenario histórico único
- Disfruta de tiempo libre para compras gourmet y fotos de postal
Qué está incluido
- Traslado de ida y vuelta en minibús climatizado Cefalú ⇄ Castelbuono
- Guía acompañante en español (inglés y francés disponibles)
- Tiempo libre en Castelbuono para visitas y compras
- Cata de 3 vinos orgánicos con bruschette, queso y aceite de oliva
La experiencia en detalle
Saldrás de Cefalú a media mañana en minibús climatizado rumbo a las laderas verdes de las Madonie. Durante el ascenso, el guía comparte anécdotas sobre los Normandos y la producción del manna, la savia dulce que ha hecho célebre a Castelbuono. Al llegar, tendrás tiempo para explorar la plaza Margherita, entrar en la iglesia matriz o saborear un cannolo recién hecho mientras el campanario marca la hora.
En la cima del pueblo se alza la Rocca Ventimiglia: sus cubiertas de arenisca ocultan frescos renacentistas y una capilla palatina dedicada a Santa Ana, patrona venerada en toda Sicilia. Tras las fotos panorámicas, el recorrido continúa hacia la Abbazia Sant’Anastasia. El aroma a mosto y madera te recibe en la sala de barricas, donde el sumiller explica la filosofía biodinámica de la finca. Degustarás un blanco Grillo cristalinamente fresco, un Nero d’Avola con notas de frutos rojos y un elegante cuvée envejecido en roble, cada uno acompañado de bruschette, pecorino y aceitunas de la propia hacienda.
Con los sentidos despiertos, dispondrás de unos minutos para pasear por los viñedos, adquirir aceite, miel de castaño o botellas firmadas por el enólogo. El regreso a Cefalú transcurre entre olivos y vistas al Tirreno, llegando a primera hora de la tarde con el recuerdo aún vivo de un rincón de Sicilia donde el tiempo parece haberse detenido.